Fue esa primera lluvia de Octubre quien le incitó a bajar la guarda para dejarse empapar hasta limpiar su ser.
Tomó el camino de huida y vuelta..
Donde las letras llegaban más lejos.
Donde existían personas que podían cambiar las cosas horrendas y que de golpe podían erradicar la falta de respeto.
Personas mágicas de las que tienen luz en los ojos, galaxias en los labios, constelaciones en la espalda y provocan universos en el pecho con tan solo una mirada.
Esas personas que se cuelan sin permiso y suelen quedarse para siempre,tienen mariposas en el cuello, las alas abiertas...
Son capaces de ofrecer el corazón, la libertad, la vida.
Son verdugos de los necios y le llevan la contra a lo injusto. Saben dejar ir...
No parecen de este mundo, son esas personas que se quedan tatuadas en la mente y dejan un recuerdo permanente en el alma..
Almas mágicas que cuando coincides con ellas hacen luz donde sólo hay oscuridad, personas con cierta sensibilidad que transforman las sombras en sensualidad, capaces de impregnarte con su esencia...
Así fue como en el camino de huida encontró la vuelta.
Y volvió brillando, con notas musicales en su corazón, cantando una canción que muy pocos escuchan, que muy pocos entienden..
Esa persona mágica eres tú,
soy yo.
Somos...
parte del Universo y al igual que que las estrellas nosotros...también brillamos.
¿Vamos al camino que nos lleva a volver a creer en nosotros?
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