QUE NO ME RINDA...

(Por Fernando D'Sandi de mi libro EXTRÁÑAME PERO VIVE, marzo 15, 2025)

No le pido a la vida que sea fácil. No le exijo que me devuelva lo que me quitó ni que haga más suave el peso de mi dolor.

Solo le pido una cosa: que no me falten las ganas de seguir. Que aún con la ausencia clavada en el alma, mi cuerpo siga respondiendo al llamado de la vida. Que mis pasos, aunque torpes y heridos, no se detengan en el mismo sitio donde te perdí.

Porque si algo he entendido en este duelo es que el dolor no es el enemigo. Lo es el quedarme quieto, el no creer en un futuro reencuentro, el  el miedo a volver a sentir, la tentación de cerrar los ojos y quedarme atrapado en un tiempo que ya no existe.

No quiero convertirme en ruina de mi propia historia. Quiero llorarte, sí. Pero también quiero reír con la misma boca que ha pronunciado tu nombre en la ausencia. Quiero extrañarte sin que eso me arranque las ganas de amar. Quiero perder y volver a intentarlo. Caer sin miedo a levantarme.

No quiero un duelo que me apague, quiero un duelo que me enseñe a brillar de otra manera.

Que me mientan, que me amen, que me hieran, que me traicionen. Que la vida me siga empujando, pero que yo nunca pierda el coraje de empujar de vuelta. Que mis cicatrices no sean lápidas, sino señales de que sigo vivo.

Porque rendirme sería la segunda muerte. Y si algo sé, es que a ti no te gustaría verme enterrado en mi propio dolor. Así que aquí estoy, reconciliándome con la vida, aunque haya días en los que duela respirarla.

No porque sea fácil. No porque ya no duela. Sino porque mientras mi corazón siga latiendo, mi historia sigue escribiéndose. Y no pienso dejar que termine en punto final antes de tiempo...

 Fernando D'Sandi