CASANDRA 

En la mitología griega, Casandra era una de las princesas de Troya, hija del rey Príamo y la reina Hécuba.

Según el mito, Casandra poseía una extraordinaria belleza y estaba bendecida con el don de prever el futuro. Sin embargo, este don venía acompañado de una terrible maldición: nadie creería en sus profecías. Esta tragedia personal desempeñó un papel crucial en los eventos que llevaron a la destrucción de Troya durante la célebre Guerra de Troya.

Existen diferentes versiones sobre cómo Casandra obtuvo su don y su maldición. La más conocida relata que el dios Apolo se enamoró de ella y, para ganarse su amor, le concedió la habilidad de la profecía. Sin embargo, cuando Casandra rechazó los avances del dios, este, enfurecido, la maldijo para que sus predicciones fueran ignoradas, sin importar cuán ciertas o precisas fueran.

Así, lo que en principio parecía una bendición se convirtió en una fuente constante de frustración y desesperación para Casandra, quien no podía evitar prever los desastres venideros, pero carecía del poder para prevenirlos.

Fuente: Historias mitológicas 

Arte: Frederick Sandys