¿Remontarías conmigo al vuelo?
¿Qué dirías si te dijera, que en tus brazos caben todos mis cielos?
Yo no creo en los ocasos desde que vi despertar tantas estrellas en tus miradas.
¿Qué dirías, si acaso yo distraído te dijera,
que mi sueño es hacer nidos de suspiros nuestra almohada?
Te abriría yo las puertas de mi pecho, sin mirar horas pasadas,
¿a qué saber lo cierto, si es mejor la noche juntos y venidera?
Yo siempre hablo de estrellas.
Cuando hablo de tus besos, hablo de estrellas.
Cuando callo en tus besos, hablo en mí de esas estrellas.
Cuando te invito a mis sueños, es mi noche triste que te llama.
Y siempre eres tú esas estrellas.
(Como es la luz de una vela,
que vence todas las sombras en el corazón que ama).
¿Qué dirías si te invitara a despertar todos mis sueños?
Yo querría multiplicar en ti mis caricias como las estrellas.
Y ahora he vuelto a decirlas.
Como si ellas un conjuro de tus besos.
Como si en ti pudiera yo tener todos los cielos.
Como si en ti las noches la eternidad pudieran ser mías.
¿Qué dirías si te invitara a despertar contigo todos mis sueños?
Jacques Pierre
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