en el rumor del agua que corre,
en la respiración del bosque,
en las voces del viento,
en la furia del trueno,
en la lluvia que te besa
y en el canterío de los pájaros que saludan tus pasos.
“Los hijos de los dias” , Eduardo Galeano.
Hija mía, mi amor
Qué linda estabas
Cuando fui a despertarte
Esta mañana
Tantas cosas pensé
Y no dije nada
Qué crecida te ví
Mi amor, qué larga
Las palabras ya ves
Jamás alcanzan
Si lo que hay que decir
Desborda el alma
Pero atiéndeme bien, cuando haga falta
A tu lado estaré, por si me llamas,
Pequeña mía, por si me llamas
El país que soñé
Que tú habitaras
Aún nos cuesta dolor
Sudor y lágrimas
Pero existe mi bien
Con tantas ganas
En tus ojos lo ví
Esta mañana
No lo olvides jamás
Pequeña y canta
Es hermoso vivir
Con esperanza
El amor puede más
Que lo que pasa
Eso quise decir, no hallé palabras
Pequeña mía, no hallé palabras
«Las emociones son como caballos salvajes. No son explicaciones que nos ayudan a seguir adelante sino nuestra voluntad de seguir adelante.”Paulo Coelho
25 de Noviembre | Día internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres
" Porque al fin y al cabo el miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del hombre a la mujer sin miedo”.
Eduardo Galeano
La Pasionaria, Mburucuyá o Passiflora caerulea, es una planta trepadora nativa para alambrados y pérgolas con una floración bellísima. Es abundante en Chaco, La Rioja, Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires. En Corrientes hay una ciudad que lleva su nombre y que es la cuna del chamamé y hay también un conocido parque nacional. En Argentina es particularmente abundante en Misiones, donde se la puede hallar al borde de las selvas o sobre los alambrados.
Su nombre científico le fue dado por botánico Carlos Linneo a raíz de que los religiosos de la época de la conquista la llamaban Pasionaria por ver en sus pétalos, pistilos y ramas la simbología de la pasión de Cristo. El epíteto especifico caerulea deriva del latín y significa azulado. Y en guaraní “mburucuyá” es ‘criadero de insectos’ .
La planta es polinizada fundamentalmente los abejorros, en especial uno localmente conocido como mangangá. En la región, las hojas de las pasionarias alimentan a las orugas de las mariposas espejitos (Agraulis vanillae maculosa), pero también a otras menos comunes. La más conocida es la passiflora caerulea pero hay muchísimas más dentro del género. Algunas nativas y otras no. La Passiflora edulis – el maracuyá – passiflora alata, passiflora chrysophylla, passiflora elegans y passiflora officinalis.
Varias especies de aves y mamíferos se alimentan de sus frutos con los que se hace un dulce riquísimo y sus hojas tienen propiedades para combatir el insomnio y la ansiedad.
Los nativos americanos usaron sus frutos como moneda de intercambio con otros pueblos. La pasionaria ha sido empleada tradicionalmente para combatir los estados de ansiedad, tensión nerviosa e insomnio, se usan las hojas en infusión, es antitusivo y antiasmático. Los guaraníes la utilizaban para preparar cataplasmas con las que trataban quemaduras, heridas e inflamaciones. Hay cientos de leyendas, cuentos y hasta compitió para ser la flor nacional de Argentina, pero perdió con el ceibo. Es la flor nacional de Paraguay.
¿Qué más podemos pedirle a esta maravillosa planta?
El cerebro del gato, tiene la misma perspectiva humana. Él ve los mismos colores que nosotros, siente las mismas emociones que nosotros. Se siente humano!
El gato, a diferencia del perro, si lo golpeás, le dará la espalda, porque se siente herido como vos. Dentro de nosotros, tenemos cristal de cuarzo, el gato tiene mucho más cristal de cuarzo.
El gato puede ver todas las energías que solo vemos a través de la meditación y el yoga.
¡El gato simplemente te ve de adentro hacia afuera! No sirve de nada tratar de hacer una cara linda para el gato o acariciarlo, si estás nervioso, si no te gusta el gato, o te atacará o ignorará por completo. ¡Es peor que un niño! Cuando al gato no le gusta alguien, es porque la persona es un mal personaje.
Cuando el gato va allí y se frota, incluso si a la persona no le gustan los gatos, ¡es porque es una buena persona! Puede ser que el gato no quiera estar cerca tuyo, porque está pasando por una fase de muy bajo grado, estás vibrando con muy poca energía, ¡así que el gato se escapa!
El gato ama a los psicóticos, los borrachos, los niños, los enfermos mentales y todos aquellos que, de alguna manera, han escapado de los estándares de la realidad. Las personas que se identifican solo con perros son personas de gran autoridad.
Para que te guste un gato, tenés que ser muy flexible y comprender que nadie pertenece a nadie, pero tenés que entender que el amor es lo único que mantiene al gato cerca tuyo.
El gato muere de depresión cuando el dueño se va. El gato negro con algunas manchas blancas tiene más sensaciones instintivas que un hombre.
El gato es tremendamente intuitivo, ha superado incluso la intuición del ser humano. Fueron quemados con brujas en la Inquisición, porque siempre estuvieron cerca de aquellos que trabajaban con el poder de la naturaleza, de las hierbas.
El gato te mira y ve de forma más natural, energías, entidades, todo lo que sentís, todo lo que te gusta, cómo sos. El perro es más racional.
El gato necesita ser educado; te mira, lee tus pensamientos y repite, porque lo entendió. Si un gato se encuentra encima tuyo, repetidamente, en el mismo lugar de su cuerpo, podés hacerte un examen, ya que carecés de energía o estás enfermo.
El gato tiene minerales en su torrente sanguíneo que lo convierten en un Reikista natural. Cuando se acuesta encima tuyo o en cualquier lugar de la casa, está transmutando las energías de ese lugar, porque allí la energía no es buena.
Gracias Akal Kartar Kaur
“Asignatura pendiente: ser felices
Reconciliarse con el entusiasmo
Buscarse entre los pliegues la sonrisa
Construirse el amor a contra-mano
y poder ser insurrectos de la historia
y develar secretos y contarlos
y amarse a voz en cuello y no estar solos
y no dejar materias para marzo”
“Asignatura pendiente” de Silvia Spitalnik