martes, 6 de julio de 2010
Chakras: centros de energía de nuestro cuerpo astral Ana M. Desirello
Para hablar de Yoga es necesario nombrar los centros de energía o chakras, si bien existen 80.000 voy a enfocarme en los siete principales que se distribuyen a lo largo de la columna vertebral.
Los Chakras son llamados también ruedas por la forma que tienen que gira constantemente, coinciden en el cuerpo físico con los centros nerviosos, de ahí la coincidencia con la electricidad porque ambas son invisibles a la vista, al igual que los llamados nadis o meridianos, que unen a estos centros y acompañan la columna vertebral desde la base anal hasta la coronilla de la cabeza.
La energía va corriendo por ellos y permite lograr la armonía y revitalizar todo el cuerpo y la mente. Se ha querido hallar una localización fisiológica de estos chakras pero no es posible porque no pertenecen al cuerpo físico, sino al cuerpo astral, aunque rijan las más elevadas funciones del organismo.
Los chakras básicos son siete y cada uno de ellos tiene un símbolo, un color y un sonido cuya vibración los activa.
En Hatea Yoga, que es el Yoga del cuerpo físico, para armonizar y equilibrar la energía vital, esto es, el Prana, hay que hacer posturas o ejercicios fáciles con los cuales la mente y el cuerpo se unen en cada uno de estos centros nerviosos; la postura hace que juntamente con la respiración conciente en ese punto disuelva el bloqueo que cada uno tiene. No hay impedimento físico ni de edad para practicar esta disciplina, lo único que deben hacer el maestro y el discípulo es adaptarlo a cada persona para que los beneficios sean innumerables.
1) Chakra Base o Muladara: significa raíz, soporte, está ubicada en la base de la columna, su color es el rojo anaranjado. Al trabajar en él logramos estabilidad psicofísica y emocional, seguridad y satisfacción de nuestra existencia, afirma la personalidad, gobierna lo sólido del cuerpo, (piernas, huesos en general, uñas y dientes), regula las actividades de los órganos sexuales y sublima la energía. Para todos los chakras existen ejercicios específicos que logran canalizar las energías de cada uno de ellos hacia otras zonas del cuerpo físico o del cuerpo etéreo. Ejercitando este chakra base o raíz logramos liberar las zonas de influencia del mismo, por ejemplo, piernas, glándulas suprarrenales, órganos genitales y así se logra una sensación de estar bien plantados, seguros y bien relacionados con los demás.
2) Swadistana: llamado Las puertas de la vida, y está ubicado en la raíz de los órganos genitales, su color es el rosado. Trabajando en él se logra creatividad y sexualidad. Las características de este centro es que posee control perfecto de los poderes psíquicos y de los sentidos y conocimiento intuitivo. Disminuye las infecciones y hemorragias, elimina el azúcar del hígado e intestino, regula la producción de adrenalina, controla la función respiratoria y elementos líquidos como orina, semen y menstruación. Por supuesto que la práctica constante de las posturas es fundamental para obtener los mencionados beneficios. El ejercicio que lo rige es el Saludo del gato y todas sus variantes.
3) Manipura: significa Batería del cuerpo, la ubicación es dos dedos arriba del ombligo, su color es el verde. Trabajando en él se logra aumentar el poder y la voluntad. Es un centro de fuerza. Las características que se logran ejercitando este centro de energía son expansividad, calidez y jovialidad. Gobierna la brillantez de la mente, regula la digestión, el estado de ánimo, produce insulina, controla el hígado, el páncreas y el estomago. Entre las posturas que se usan para equilibrar este nudo nervioso están las que son boca abajo o de rodilla con flexión de columna.
4) Añahata: significa sonido que nace del silencio, está ubicado a la altura del corazón, su color es el amarillo. Trabajando este Chakra se logra alcanzar el amor universal. Desarrolla la capacidad de amar, de abrir el corazón y de dar. Aumenta nuestras cualidades tales como la suavidad, la ligereza y la simpatía con los demás. Es el centro de devoción y felicidad. Controla emociones y restablece el equilibrio con el chakra base o raíz. Entre las posturas que se usan para equilibrar este centro nervioso están las de pie, por ejemplo batiendo alas y cruz sobre el corazón.
5) Vishudha: significa perfecto – grande, está ubicado en la base de la garganta, su color es el azul pálido. Trabajando este Chakra aumenta el poder de comunicación y la habilidad de auto expresión. Es el punto vital entre cuatro elementos inferiores y el principio del pensamiento Es el llamado centro del sonido del silencio, éste es el más potente de las cinco vibraciones inferiores y las afecta a todas. Mejora tiroides (glándula principal para regular el metabolismo) y alberga la sabiduría de la palabra mediante la emisión de la voz. Las posturas para ocuparse de este centro son con el trabajo del cuello, cabeza y hombros.
6) Ajña: significa mando, está ubicado en el entrecejo, su color es azul oscuro, añil.Punto donde se conjugan las dos nadis ida y píngala. Centro de clarividencia, el tercer ojo para los hindúes. Trabajando este centro se agudiza el intelecto de la persona, mediante posturas meditativas logrando habilidad psíquica e imaginación para visualizar. Se usa en meditaciones como chakras base. El sonido característico de este centro es el OM mantra del sonido universal, conexión con lo divino, su vibración produce sanción y mucha paz interior. Se utiliza para quitar el insomnio y aquietar las mentes perturbadas pero para obtener resultados se debe practicar en forma regular.
7) Sahasrara: significa loto de los mil pétalos, está ubicado en la coronilla de la cabeza, su color es el dorado o violáceo. Gobierna la conciencia universal. Trabajando este centro se reactivan poderes psíquicos, sentimientos, estados subconscientes y sueños. Se llega a un estado de éxtasis cuando la energía que viene subiendo desde el chakra base hasta la coronilla de la cabeza logra iluminación y unión con la energía universal, con lo divino. En Occidente es muy difícil llegar a este estado pues se requiere de mucha práctica, pero sí se logra cierto bienestar que restablece un cambio de ánimo, humor y hasta se logra frenar el torbellino de nuestra mente agitada logrando una sensación de paz, serenidad y de autoestima bien alta.
Si trabajás los siete chakras vas a obtener la armonía y el equilibrio que toda persona necesita para sentirse bien. Logrando un bienestar absoluto a nivel físico y espiritual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario