jueves, 4 de diciembre de 2025

Poco se habla de la dificultad de las despedidas…
Uno no solo del cuerpo del otro, sino también de todos los futuros posibles: del abrazo, del contacto, incluso de la escena final de la muerte. Es una ruptura tan definitiva que ni siquiera se permite el último gesto de compañía humana…
Este fragmento de”Ya no” de Idea Vilariño me deja sin palabras…
La nostalgia es la manera en que el alma se aferra a los días que nunca debieron irse.

Haruki Murakami

miércoles, 3 de diciembre de 2025

Huayquerías, Mendoza

Huayquerías en el Valle de Uco, Mendoza 

Foto: @dronetripmx 
 Este lugar se encuentra 110 km al sur de la ciudad de Mendoza y a 11 km de San Carlos, en el Valle de Uco 
"Nadie puede presumir de conocer el mar sin haberlo visto en la calma y en la tempestad. Sólo conoce a los hombres y a las mujeres, quien los ha visto en una época como ésta. Sólo ése se conoce a sí mismo".
"Suite francesa", Irene Némirovsky
📷Jeff Hobson
Mi propio conocimiento es el único y el máximo tesoro que poseo. Cierto que es infinitamente pequeño y frágil ante el poder de las tinieblas, pero una luz al fin y al cabo. Mi propia luz.

Carl Gustav Jung 
Arte: Akira Kusaka

martes, 2 de diciembre de 2025

"Viajar, dormir, enamorarse, son tres modos de irse a lugares que no siempre entiendes."
 Ángeles Mastretta
📷 Kees Schere
"NANKURUNAISA"
Es una de las palabras más bellas del mundo. Es japonés y significa: Con el tiempo se arregla todo.
Si nunca te vuelvo a ver
siempre te llevaré conmigo;
            adentro,
            afuera,
       en mis dedos
y en los bordes del cerebro
          y en centros 
           de centros
de lo que soy y de lo que queda.
                            Charles Bukowski

🎨 El arte de Holly Stapleton
SOY

Soy el que sabe que no es menos vano
que el vano observador que en el espejo
de silencio y cristal sigue el reflejo
o el cuerpo (da lo mismo) del hermano.

Soy, tácitos amigos, el que sabe
Que no hay otra venganza que el olvido
Ni otro perdón. Un dios ha concedido
Al odio humano esta curiosa llave.

Soy el que pese a tan ilustres modos
de errar, no ha descifrado el laberinto
singular y plural, arduo y distinto,
del tiempo, que es de uno y es de todos.

Soy el que es nadie, el que no fue una espada
en la guerra. soy eco, olvido, nada.

Jorge Luis Borges,
"La rosa profunda" (1975)
HOGAR

Y uno llega a su casa
y se encierra
entre los cuatro muros
de la soledad
del silencio.
Y uno está en su casa
y le acompañan
el que no está
lo no vivido
un colchón frío
y una
ventana
abierta.

— Ana María Rodas
(de El fin de los mitos y los sueños, 1984).

No hay puertas

[Poema - Texto completo.]

Olga Orozco

Con arenas ardientes que labran una cifra de fuego sobre el tiempo,
con una ley salvaje de animales que acechan el peligro desde su madriguera,
con el vértigo de mirar hacia arriba,
con tu amor que se enciende de pronto como una lámpara en medio de la noche,
con pequeños fragmentos de un mundo consagrado para la idolatría,
con la dulzura de dormir con toda tu piel cubriéndome el costado del miedo,
a la sombra del ocio que abría tiernamente un abanico de praderas celestes,
hiciste día a día la soledad que tengo.
Mi soledad está hecha de ti.
Lleva tu nombre en su versión de piedra,
en un silencio tenso donde pueden sonar todas las melodías del infierno;

camina junto a mí con tu paso vacío,
y tiene, como tú, esa mirada de mirar que me voy más lejos cada vez,
hasta un fulgor de ayer que se disuelve en lágrimas, en nunca.
La dejaste a mis puertas como quien abandona la heredera
de un reino del que nadie sale y al que jamás se vuelve.
Y creció por sí sola,
alimentándose con esas hierbas que crecen en los bordes del recuerdo
y que en las noches de tormenta producen espejismos misteriosos,
escenas con que las fiebres alimentan sus mejores hogueras.
La he visto así poblar las alamedas con los enmascarados que inmolan al amor
-personajes de un mármol invencible, ciego y absorto como la distancia-,
o desplegar en medio de una sala esa lluvia que cae junto al mar,
lejos, en otra parte,
donde estarás llenando el cuenco de unos años con un agua de olvido.
Algunas veces sopla sobre mí con el viento del sur
un canto huracanado que se quiebra de pronto en un gemido
en la garganta rota de la dicha,
o trata de borrar con un trozo de esperanza raída
ese adiós que escribiste con sangre de mis sueños en todos los cristales
para que hiera todo cuanto miro.
Mi soledad es todo cuanto tengo de ti.
Aúlla con tu voz en todos los rincones.
Cuando la nombro con tu nombre
crece como una llaga en las tinieblas.
Y un atardecer levantó frente a mí
esa copa del cielo que tenía un color de álamos mojados
y en la que hemos bebido el vino de la eternidad de cada día,
y la rompió sin saber, para abrirse las venas,
para que tú nacieras como un dios de su espléndido duelo.
Y no pudo morir
y su mirada era la de una loca.
Entonces se abrió un muro
y entraste en este cuarto con una habitación que no tiene salidas
y en la que estás sentado, contemplándome, en otra soledad
semejante a mi vida.



El amor es un robo -me dijiste una tarde-
robamos y nos roban, y así pasa de modo
que en los senderos quedan nuestras mejores galas
resecas como lirios que marchitó el otoño.

Han pasado los años y de nuevo tu imagen
cruzó por mis ideas con la luz de un meteoro,
y mirando en mi abismo y hallando mucha sombra
recuerdo tus palabras: El amor es un robo.

Leopoldo Marechal, Los aguiluchos
Foto: Mariano Belmar Torrecilla.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
—esta muerte que nos acompaña
de la mañana a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un vicio absurdo. Tus ojos
serán una palabra hueca,
un grito ahogado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando a solas te inclinas
 hacia el espejo. Oh querida esperanza,
ese día también sabremos
que eres la vida y la nada.

Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como mirar en el espejo
asomarse un rostro muerto,
como escuchar un labio cerrado.
Nos hundiremos en el remolino, mudos.

  Cesare Pavese (1950)
BARRIO RECUPERADO

Nadie vio la hermosura de las calles 
hasta que pavoroso en clamor 
se derrumbó el cielo verdoso 
en abatimiento de agua y de sombra. 
El temporal fue unánime 
y aborrecible a las miradas fue el mundo, 
pero cuando un arco bendijo 
con los colores del perdón la tarde, 
y un olor a tierra mojada 
alentó los jardines, 
nos echamos a caminar por las calles 
como por una recuperada heredad, 
y en los cristales hubo generosidades de sol 
y en las hojas lucientes 
dijo su trémula inmortalidad el estío.

— Jorge Luis Borges

*
Fotografía de personas caminando bajo la lluvia en calle Florida (Buenos Aires) a fines de los años 50.
No sé si alguna vez podré mirarte a los ojos y decirte todo lo que siento sin que se me quiebre la voz, sin que el eco de mi silencio te arrastre al abismo de mi dolor.

Alejandra Pizarnik
"Sé fiel a lo que existe dentro de ti."
André Gide
📷Noell Oszvald
"La vida me rodea, como en aquellos años
ya perdidos, con el mismo esplendor
de un mundo eterno. La rosa cuchillada
de la mar, las derribadas luces
de los huertos, fragor de las palomas
en el aire, la vida en torno a mí,
cuando yo aún soy la vida.
Con el mismo esplendor, y envejecidos ojos,
y un amor fatigado.
¿Cuál será la esperanza? Vivir aún;
y amar, mientras se agota el corazón,
un mundo fiel, aunque perecedero.
Amar el sueño roto de la vida
y, aunque no pudo ser, no maldecir
aquel antiguo engaño de lo eterno.
Y el pecho se consuela, porque sabe
que el mundo pudo ser una bella verdad".

"Cuando yo aún soy la vida", Francisco Brines
"Cuántas veces más recordarás una tarde de tu infancia, una tarde tan profunda en tu ser que ni siquiera puedes concebir tu vida sin ella? Quizá cuatro o cinco veces más. Quizá ni siquiera eso. Cuántas veces más verás salir la luna llena? Quizá veinte. Y, sin embargo, todo parece ilimitado".

"El cielo protector", Paul Bowles
Marc Chagall (1887-1985) Los amantes, 1916 

Las Dunas Blancas y el volcán Carachi, Catamarca

Las Dunas Blancas y el volcán Carachi,
Antofagasta de la Sierra,
Catamarca 

lunes, 1 de diciembre de 2025

"Una de las misteriosas leyes de la vida es que descubrimos siempre tarde sus auténticos y más esenciales valores".

Stefan Zweig