jueves, 16 de agosto de 2018

Oriah Mountain Dreamer

No me interesa saber cómo te ganas la vida. Quiero saber qué deseas, y si te atreves a soñar con aquello que tu corazón desea.
No me interesa saber tu edad. Quiero saber si te arriesgarías a parecer un bobo por amor, por tus sueños, por la aventura de estar vivo.
No me interesa saber que planetas están en cuadratura con la Luna. Quiero saber si has llegado al centro de tu tristeza, si las traiciones de la vida te han abierto o si te has marchitado y cerrado por medio a nuevos dolores. Quiero saber si puedes vivir con el dolor, con el mio o el tuyo, sin intentar disimularlo ni ponerle remedio.
Quiero saber si puedes experimentar con plenitud la alegría, la mia o la tuya, si puedes bailar con frenesí y dejar que el éxtasis te penetre hasta la punta de los dedos de los pies sin que tu prudencia nos haga ser quisquillosos, realistas, ni nos recuerde las limitaciones propias de nuestra condición humana.
No me interesa saber si lo que me explicas es cierto. Quiero saber si puedes decepcionar a otra persona para ser fiel a ti mismo; si puedes soportar la acusación de traición y no traicionar a tu alma…
Quiero saber si puedes ver la belleza cada día, a pesar de que no sea agradable, y si puedes hacer que tu vida surja de su presencia.
Quiero saber si puedes vivir con el fracaso, el tuyo y el mio, y de pie a la orilla del lago gritar a la plateada forma de la luna llena: “¡Sí!”
No me interesa saber dónde vives ni cuánto dinero tienes. Quiero saber si te puedes levantar después de una noche de aflicción y desesperanza, agotado y magullado hasta los huesos y hace lo necesario para alimentar a tus hijos.
No me interesa saber a quién conoces ni cómo has llegado hasta aquí. Quiero saber si te quedarás en el centro del fuego conmigo y no lo rechazarás.
No me interesa saber ni dónde ni cómo ni con quién has estudiado. Quiero saber qué te mantiene, desde dentro, cuando todo a tú alrededor se hunde.
Quiero saber si puedes estar solo contigo y si de verdad aprecias tu compañía en momentos de vació.
Oriah Mountain Dreamer

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